El Peritaje de Trabajo Social como herramienta para determinar la capacidad económica de las partes en los juicios de pensión alimenticia

Introducción

En los procesos judiciales referentes a pensiones alimenticias, la determinación de la capacidad económica de las partes es un aspecto crítico que influye directamente en el bienestar de los menores involucrados. Para que el juez pueda establecer un monto de pensión alimenticia justo y acorde a las necesidades reales, es imprescindible contar con un análisis detallado y objetivo de las condiciones socioeconómicas de ambas partes. Aquí es donde el peritaje en trabajo social se convierte en una herramienta indispensable, proporcionando una evaluación integral que va más allá de los simples números financieros.

¿Qué es el Peritaje en Trabajo Social?

El peritaje en trabajo social es un informe técnico y especializado elaborado por profesionales del área de trabajo social, quienes, a través de metodologías científicas y un enfoque holístico, analizan las circunstancias sociales, económicas y familiares de las personas involucradas en un litigio. Este peritaje no solo se centra en los ingresos monetarios declarados, sino que también considera aspectos como el entorno familiar, las redes de apoyo, las condiciones de vivienda, la educación y la salud, entre otros factores que pueden influir en la capacidad económica y el bienestar general de las partes.

Los trabajadores sociales peritos emplean técnicas como entrevistas en profundidad, visitas domiciliarias, observación directa y revisión de documentación, para recopilar información que permita una comprensión completa de la situación. Este enfoque multidimensional es esencial para proporcionar al juez una visión clara y objetiva, que facilite la toma de decisiones informadas y justas.

Importancia del Peritaje en Casos de Pensión Alimenticia

1. Evaluación Integral de la Capacidad Económica

   La capacidad económica de una persona no se limita únicamente a su salario o ingresos formales. Existen múltiples factores que pueden afectar la situación financiera, como ingresos adicionales no declarados, propiedades, inversiones, deudas y obligaciones financieras previas. El peritaje en trabajo social permite una evaluación profunda de todos estos elementos, considerando también gastos fijos, costo de vida, responsabilidades económicas y estilo de vida.

   Por ejemplo, un deudor alimentario puede tener un ingreso salarial modesto, pero poseer propiedades o vehículos de alto valor, o recibir ingresos por actividades informales. El peritaje identifica estos aspectos, asegurando que se tenga en cuenta toda la capacidad económica real al determinar el monto de la pensión.

2. Transparencia y Objetividad

   En muchos casos, las partes pueden presentar información parcial o sesgada sobre su situación económica, ya sea para disminuir sus obligaciones o aumentar los beneficios. El perito en trabajo social actúa como un tercero neutral y objetivo, cuya función es recopilar y analizar información de manera imparcial. Esto garantiza que el juez reciba datos veraces y completos, evitando decisiones basadas en información incompleta o distorsionada.

   Además, el peritaje se sustenta en evidencias documentales y observaciones directas, lo que fortalece la credibilidad del informe y reduce la posibilidad de manipulaciones o engaños.

3. Protección del Interés Superior del Menor

   El principal objetivo en los casos de pensión alimenticia es garantizar el bienestar y desarrollo integral del menor. El peritaje en trabajo social se enfoca en identificar las necesidades reales del niño o adolescente, considerando aspectos como alimentación, educación, salud, vestimenta, vivienda y recreación. Al determinar la capacidad económica del deudor alimentario, el perito asegura que el monto de la pensión cubra adecuadamente estas necesidades, promoviendo el interés superior del menor.

   Asimismo, el peritaje puede detectar situaciones de vulnerabilidad o riesgo en el entorno familiar, proporcionando recomendaciones adicionales para proteger al menor y mejorar su calidad de vida.

4. Facilitación de Acuerdos entre las Partes

   Un informe pericial detallado y objetivo puede servir como base para que las partes lleguen a acuerdos extrajudiciales. Al tener una evaluación clara y fundamentada de la capacidad económica y las necesidades del menor, es más probable que ambas partes acepten las conclusiones y eviten prolongar el conflicto legal. Esto no solo ahorra tiempo y recursos, sino que también reduce el estrés y el impacto emocional en los involucrados, especialmente en los niños.

Elementos Clave del Peritaje

• Análisis Socioeconómico

  Este componente implica una evaluación exhaustiva de los ingresos y gastos de las partes, incluyendo salarios, ingresos por actividades independientes, rentas, pensiones y cualquier otra fuente de recursos. También se consideran los gastos fijos como alimentación, servicios públicos, transporte, educación, salud y deudas. El objetivo es establecer un balance financiero realista que refleje la capacidad de pago del deudor alimentario y las necesidades económicas del acreedor alimentario.

• Estudio del Entorno Familiar

  El peritaje analiza la composición y dinámica familiar, identificando a los dependientes económicos y las relaciones de apoyo o carga. Por ejemplo, si el deudor alimentario tiene otros hijos bajo su cuidado, padres ancianos o familiares con discapacidad, esto se considera en la evaluación. Asimismo, se examinan aspectos como la estabilidad del hogar, la calidad de las relaciones familiares y el ambiente en el que se desarrolla el menor.

• Evaluación del Estilo de Vida

  Más allá de los ingresos y gastos declarados, el peritaje observa el nivel de vida de las partes. Esto incluye la propiedad de bienes materiales como casas, vehículos, aparatos electrónicos, así como patrones de consumo y gastos en ocio, viajes y actividades recreativas. Un estilo de vida elevado puede indicar una capacidad económica mayor a la declarada, lo que es relevante para determinar una pensión alimenticia justa.

• Potencialidad Laboral

  Este elemento considera las habilidades, experiencia laboral, nivel educativo y oportunidades de empleo de las partes. Un deudor alimentario puede estar subempleado o no aprovechar plenamente su potencial para generar ingresos. El peritaje evalúa estas circunstancias, identificando si existe la posibilidad de aumentar su capacidad económica en el futuro cercano. Esto es importante para establecer pensiones escalonadas o revisar montos en el futuro.

Proceso de Elaboración del Peritaje

1. Recolección de Información

   El perito en trabajo social inicia con la recopilación de datos, utilizando diversas técnicas:

   • Entrevistas: Con las partes involucradas, familiares, empleadores y otras personas relevantes.

   • Visitas Domiciliarias: Para observar las condiciones de vivienda y el entorno familiar.

   • Revisión Documental: Análisis de estados financieros, comprobantes de ingresos, facturas, contratos, registros bancarios, entre otros.

2. Análisis de Datos

   Una vez recopilada la información, el perito procede a analizarla de manera integral, identificando patrones, inconsistencias y aspectos relevantes. Se utilizan herramientas estadísticas y metodologías de trabajo social para interpretar los datos y obtener conclusiones fundamentadas.

3. Elaboración del Informe

   El informe pericial se redacta de forma clara y detallada, incluyendo:

   • Introducción: Objetivos y alcance del peritaje.

   • Metodología: Técnicas y procedimientos utilizados.

   • Resultados: Hallazgos detallados con evidencia documental y observaciones.

   • Conclusiones: Síntesis de los hallazgos más relevantes.

   • Recomendaciones: Sugerencias para el juez respecto al monto de la pensión y otras medidas pertinentes.

4. Presentación en Juicio

   El perito puede ser citado para presentar el informe ante el tribunal, respondiendo preguntas y aclarando dudas que puedan surgir. Su testimonio es fundamental para respaldar las conclusiones del informe y aportar mayor claridad al juez.

Artículos Relevantes para fijar el monto de Pensión Alimenticia en Querétaro

1. Artículo 293: Alcance de la Obligación Alimentaria
   Este artículo define los alimentos como todo lo que se necesita para el sustento, incluyendo comida, vestimenta, vivienda, esparcimiento y salud. En el caso de los hijos, también se incluyen los gastos para su educación básica y para brindarles una formación que se adecue a sus circunstancias. Para acreedores alimentarios mayores de edad que estén cursando estudios técnicos o superiores, la obligación subsiste hasta que terminen sus estudios, siempre y cuando no superen los 25 años de edad. Asimismo, para personas con discapacidad, adultos mayores o declaradas en estado de interdicción, los alimentos comprenden los gastos para el tratamiento especial que requieran. El peritaje social, al analizar la situación económica, debe tener en cuenta todas estas necesidades para proponer un monto de pensión alimenticia que cubra los requerimientos del acreedor.

2. Artículo 296: Proporcionalidad de los Alimentos
   Este artículo establece que la pensión alimenticia debe ser acorde a las posibilidades económicas del deudor alimentario y a las necesidades del acreedor. Cuando se trata de menores de edad, se debe privilegiar el interés superior de estos. Una vez que los alimentos se determinen por convenio o sentencia, se establece un incremento automático mínimo equivalente al aumento porcentual del salario mínimo vigente, salvo que el deudor demuestre que sus ingresos no crecieron en la misma proporción. Si los ingresos del deudor no son comprobables, el juez basará su decisión en la capacidad económica y el nivel de vida del deudor y sus acreedores alimentarios de los últimos dos años. Este artículo es esencial para el peritaje social, ya que este se encarga de evaluar la situación económica real y el nivel de vida del deudor alimentario para que se fije una pensión justa.

3. Artículo 300: Acción para Pedir el Aseguramiento de los Alimentos
   Este artículo señala que tienen derecho a solicitar el aseguramiento de los alimentos: el acreedor alimentario, el ascendiente que tenga bajo su patria potestad a un menor, el tutor, los hermanos y demás parientes colaterales dentro del cuarto grado, el Ministerio Público, y la Procuraduría de Defensa del Menor y la Familia. El peritaje social puede colaborar con estas personas al reunir y analizar toda la información socioeconómica relevante que sirva para fijar la pensión alimenticia de manera adecuada.Artículo 301: Nombramiento de un Tutor Interino
   Cuando las personas mencionadas en el artículo anterior (fracciones II, III y IV) no pueden representar al acreedor alimentario en el juicio para solicitar el aseguramiento de alimentos, el juez designará un tutor interino. El peritaje social es fundamental aquí, ya que proporciona información imparcial que garantiza una representación adecuada del menor y permite determinar con precisión sus necesidades económicas y familiares.

4. Artículo 302: Formas de Aseguramiento de los Alimentos
   Este artículo detalla que el aseguramiento de la pensión alimenticia puede consistir en diferentes formas de garantía, como hipoteca, prenda, fianza o cualquier otra que el juez considere suficiente. La intervención del peritaje social puede ser clave para orientar al juez sobre la forma más adecuada de garantía según la capacidad económica del deudor, asegurando así el cumplimiento efectivo de la obligación alimentaria.

5. Artículo 305: Causales para Cesar la Obligación Alimentaria
   La obligación de otorgar alimentos cesa bajo ciertas circunstancias: si el obligado carece de medios para cumplir con la obligación; si el alimentista deja de necesitar los alimentos; en caso de injuria o daño grave causado por el alimentista al obligado, excepto si el alimentista es menor y el deudor es el padre, madre o tutor; si la necesidad de los alimentos depende de la conducta viciosa o falta de aplicación al trabajo del alimentista, mientras persistan estas causas; y si el alimentista abandona la casa del deudor sin justificación. El peritaje social resulta esencial para evaluar si alguna de estas situaciones se presenta y, en consecuencia, determinar si procede el cese de la obligación alimentaria.

Conclusión

El peritaje en trabajo social es una herramienta esencial en los procesos de pensión alimenticia, ya que proporciona una evaluación completa y objetiva de la capacidad económica de las partes y las necesidades del menor. Su importancia radica en que facilita al juez la toma de decisiones justas y equitativas, asegurando el bienestar de los niños y promoviendo la responsabilidad de los deudores alimentarios. Los jueces en Querétaro tienen la costumbre para fijar la pensión alimenticia provisional fijar los siguientes porcentajes del sueldo del deudor alimentario: 1 acreedor el 25%, dos acreedores 30% y tres acreedores el 35% de todas las percepciones del deudor alimentario menos deducciones de ley.

Al considerar factores económicos, sociales y familiares, el peritaje en trabajo social contribuye a que las decisiones judiciales sean integrales y estén fundamentadas en la realidad de los involucrados. Esto no solo beneficia al menor, sino que también promueve la equidad y la justicia en el sistema legal.